La tecnología de los drones se ha incorporado al sector de energías renovables, más concretamente al de los parques fotovoltaicos, como herramienta indispensable para reducir los tiempos de inspección y mejorar la precisión de las mediciones. Estas inspecciones son imprescindibles para garantizar que los activos generen la producción eléctrica esperada y alargar su vida útil. En este campo la compañía española Aerocamaras es uno de los referentes en Europa y Latinoamérica.
Entre las instalaciones que han adjudicado a Aerocamaras la inspección aérea de sus equipos se encuentra Pirapora, la mayor central fotovoltaica de América Latina y una de las más extensas del mundo. Cuenta con más de 800 hectáreas y alberga más de un millón de paneles solares. Los drones, equipados con cámaras térmicas, infrarrojas y HD consiguen, de una sola pasada, grabar al completo el parque solar y mejorar los tiempos de inspección y reacción ante cualquier fallo.
Jaime Pereira, CEO de Aerocamaras, destaca: "Nuestra experiencia en Brasil está siendo muy positiva, reduciendo un 85% los tiempos de inspección. El sector necesitaba un paso más allá de lo que ofrecían los métodos tradicionales por el aumento de instalaciones, y con nuestros drones estamos dando esa solución. Podemos detectar cualquier anomalía o desperfecto en poco tiempo".
Aerocamaras, cuyos equipos trabajan también en Portugal, Italia y México, emplea en sus labores de inspección el dron híbrido AeroHyb, con hasta 7 horas de autonomía y centrado en servicios profesionales como logística, inspecciones técnicas, emergencias, seguridad, topografía, agricultura de precisión o audiovisual.
Fuente: Fundación Consejo España-Brasil